
trayectoria multidimensional
Perfil y recorrido deportivo de Ana González Carro Fundadora del Club Minerva de Tenis de Mesa
Trayectoria como jugadora
Categorías: Inició su carrera deportiva en el equipo del Colegio Jesús Maestro de León en infantil, juvenil y después en el Universidad de León en Sub‑21, estando clasificada en el Ranking Nacional entre las 12 mejores jugadores de España en su categoría. Actualmente veterana a nivel nacional.
Logros individuales y en equipo:
Campeona de León y Castilla y León en categorías: individual, dobles femeninos, mixtos y equipos.
Contribución clave al ascenso del equipo femenino de la Universidad de León a la categoría nacional de División de Honor del Tenis de mesa femenino más alta en dos ocasiones.
Competidora activa: 5ª de España en categoría +50.
Experiencia
Profesional con +20 años de experiencia en innovación, estrategia y docencia universitaria.
Experiencia en multinacionales (SAS Institute, Satec) y locales.
Profesora universitaria en marketing y organización empresarial en la Universidad de León.
Entrenadora de tenis de mesa acreditada por la Escuela Nacional de Entrenadores (ENE).
Monitora de tenis de mesa para colegios del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo: impulsó la práctica deportiva en edades tempranas, integrando valores educativos.
Voluntaria olímpica en Barcelona 1992 en el pabellón de tenis de mesa: experiencia deportiva de élite que amplió su visión internacional sobre el deporte y el voluntariado.
Rol gestora comunitaria y social
Fundadora y directora del Club Minerva TT, que no solo compite, sino que despliega una clara misión de:
Empoderar a niñas a través del tenis de mesa.
Generar impacto local en León y Castilla y León.
Incorporar innovación en estrategias de formación deportiva.
BENEFICIOS DEL TENIS DE MESA
El tenis de mesa es considerado por expertos como uno de los deportes más beneficiosos para el cerebro, y se ha demostrado eficaz como herramienta de estimulación cognitiva, regulación emocional y mejora motora, según investigaciones del Dr. Daniel Amen y otros estudios clínicos.
INFANCIA Y ADOLESCENCIA (6–17 años)
Objetivo: Neurodesarrollo óptimo, autorregulación emocional y formación de hábitos saludables.
Mejora de la función ejecutiva: atención, inhibición de impulsos y toma de decisiones (clave para niños/as con TDAH).
Refuerzo de la autoestima y el sentido de logro progresivo.
Entrena la coordinación ojo-mano y el desarrollo motriz fino y grueso.
En niñas, se asocia con mayor persistencia académica y habilidades STEM indirectas (por la lógica del juego).
JÓVENES Y ADULTOS (18–45 años)
Objetivo: Gestión del estrés, salud mental, agilidad mental.
Aumenta la velocidad de procesamiento mental y la memoria de trabajo.
Fomenta la toma de decisiones bajo presión, útil en entornos profesionales.
Promueve relaciones sociales saludables y networking activo.
Protege contra el estrés crónico y previene burnout laboral.
ADULTOS MAYORES (+45)
Objetivo: Prevención del deterioro cognitivo, socialización activa y bienestar integral.
Reduce el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y Parkinson (confirmado por estudios con escáner SPECT).
Mejora el equilibrio, la coordinación y reduce el riesgo de caídas. Estimula la neurogénesis (creación de nuevas neuronas) gracias a los reflejos rápidos y toma de decisiones continuada.
Potente antídoto contra el aislamiento social.


















